En España las compañías ferroviarias, primero las privadas y después RENFE, se dotaron de unas instalaciones técnicas que fueran capaces de mantener todos sus vehículos en permanente estado de servicio. Los talleres tenían unas características singulares, que vinieron determinadas principalmente por el mantenimiento de las locomotoras, organizado en torno a dos tipos de instalaciones: los depósitos y un pequeño número de grandes talleres, que se encargaban de las grandes reparaciones. Todas estas instalaciones, además, fueron evolucionando para adaptarse a las tecnologías y los nuevos criterios de mantenimiento. El programa tiene guión de Miguel Muñoz, gerente de Investigación Histórica y Patrimonio Documental de la Fundación de los Ferrocarriles Españoles y editor de ‘Historia de los talleres de Renfe,1941-2023. El mantenimiento del material rodante’, publicado recientemente por la Fundación.