Los dos museos gestionados por la Fundación permitirán desde hoy la visita con perros para poder vivir una experiencia cultural única. Con el fin de asegurar que la visita sea cómoda y segura para todos, se han establecido unas normas de convivencia básicas que deberán consultar quienes vengan acompañados de sus amigos de cuatro patas.
Desde hoy mismo el Museo del Ferrocarril de Madrid y el Museo del Ferrocarril de Cataluña, gestionados por la Fundación, permiten que los amantes de los trenes puedan disfrutar de su visita en compañía de sus perros.
Los museos de la Fundación se unen al pequeño círculo de museos y establecimientos culturales de Madrid que abren sus puertas a visitantes acompañados de sus amigos de cuatro patas, aunque sin duda esta tendencia ‘dog friendly’ en museos va cogiendo fuerza y constituye una oportunidad excepcional para quienes no quieren dejar a su mascota en casa cuando organizan un plan cultural. Los perritos también pueden ser parte de la aventura que supone caminar entre impresionantes locomotoras y coches históricos, mientras se va descubriendo la fascinante historia del ferrocarril.
Los dos museos albergan una amplia colección de vehículos históricos, que abarca desde las primeras máquinas de vapor hasta trenes más modernos, y están instalados en unos equipamientos de amplias dimensiones, fruto de la transformación en espacios museísticos de antiguas estaciones, talleres o depósitos de locomotoras, que resultan propicios para una visita cómoda y saludable.
Normas de convivencia
Para asegurar que la visita sea cómoda y segura para todos, los museos han establecido unas normas de convivencia básicas para quienes vengan acompañados de sus perros. Estas normas están diseñadas para garantizar que tanto los animales como los demás visitantes disfruten de una experiencia agradable. Se recomienda consultar las normas de acceso para organizar todos los aspectos de la visita previamente.