Page 78 - I Concurso literario Miguel delibes
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1   Certamen


              Literatura  Infantil


                Miguel Delibes


















                                                                                                                                                                                                                                                                                                               Un ave con mucha clase








                                                                                                                                                                                                                                                                                                Adrián González - Colegio Sagrado Corazón - Corazonistas















                                                                                                                                                                                                                                                                          El último fin de semana de noviembre, mí madre y yo decidimos hacer un

                                                                                                                                                                                                                                                                          viaje en tren hasta Barcelona. Mi padre se había ido a trabajar allí y hacía


                                                                                                                                                                                                                                                                          dos semanas que no le veíamos. Por eso hicimos la maleta y nos fuimos


                                                                                                                                                                                                                                                                          hasta la estación de trenes sin pensarlo mucho. No sabíamos los horarios de


                                                                                                                                                                                                                                                                          los trenes a Barcelona pero tuvimos mucha suerte: el primer tren salía en


                                                                                                                                                                                                                                                                          cuarenta y cinco minutos y había billetes disponibles.





                                                                                                                                                                                                                                                                          Mientras esperábamos el tren, nos sentamos en un banco y jugamos a un


                                                                                                                                                                                                                                                                          juego que nos gustaba mucho: a decir diez palabras que empiecen por las


                                                                                                                                                                                                                                                                          distintas letras del abecedario.



                                                                                                             Manuel Gómez Arce.

                                                                                                           Campos de La Mancha.                                                                                                                                           Cuando por fin llegó nuestro tren, nos emocionamos mucho porque empezaba


                                                                                                                      Acrílico.                                                                                                                                           nuestra aventura: ¡Estaríamos viajando en tren casi seis horas!, ¡y eso que

                                                                                                                                                                                                                                                                          nuestro tren era un AVE! Si llega a ser un tren normal hubiesen sido muchas


                                                                                                                                                                                                                                                                          más horas.












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