Page 87 - I Concurso literario Miguel delibes
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1 Certamen
Literatura Infantil
Miguel Delibes
Los tres amigos prepararon las maletas y empaquetaron con mucho cuidado, Continúan con su viaje, hasta que de pronto, todo se oscurece. Marina
en una caja llena de celo, su barco. Al día siguiente, fueron a la estación. dijo: ¡Estamos pasando por un túnel! Y de repente, un ruido fuerte les
Estaban nerviosos e ilusionados, porque era la primera vez que participaban sorprende. El ferrocarril pierde velocidad hasta que se para. El revisor pasa
en un concurso y además, se montaban en ferrocarril. Al fondo se veía un por todos los vagones informado de que había sufrido una avería ¡Señores
humo de color grisáceo ¡Ya estaba aquí el ferrocarril!. y señoras, debido a una vería tiene que cambiarse de ferrocarril! Los tres
amigos, cogieron sus maletas y la caja del barco, y a oscuras entre las
Cuando subieron, se sorprendieron al ver tantos asientos. No eran capaces de piedras de las vías, anduvieron hasta salir del túnel. Allí, les recogería el
encontrar donde se tenían que sentar. Tuvieron que cambiarse de vagón una nuevo ferrocarril. Después de esperar casi dos horas, por fin llegó. Una vez
vez sentados, colocaron sus maletas en la parte de arriba de los asientos. montados y acomodados, respiraron tranquilos porque parecía que su barco
Pero la caja del barco no les cabía. La dejaron en sus pies apoyada para que estaba a salvo. Estaban deseando llegar a su destino.
no se moviera y evitar que se desmontara. Una vez arrancó el tren, les
temblaban los pies por el traqueteo sobre las vías. Se preocuparon por si lo Ya solo quedaban treinta y cinco kilómetros, cuando sienten un frenazo
que llevaban dentro de la caja se rompía. busco. La caja dio cinco vueltas como un dado, las maletas salieron volando
hacia el asiento de enfrente y ellos casi salen despedidos. No sabían que
Cuando ellos ya estaban más relajados y disfrutando del viaje, se sentó una estaba pasando. Álvaro se asoma por la ventana y ve cuatro vacas en medio
madre con su hijo en el asiento de enfrente. El niño venía enfadado porque, de la vía tan tranquilas. El revisor bajón con su silbato y su banderín para
al parecer, había perdido un juguete. Lloraba desconsolado. Su madre no intentar apartarlas. Lo consiguió muy rápido.
conseguía que se calmara. Comenzó a mover las piernas y una de las patadas
se la llevó el barco. Álvaro, Elías y Marina no sabían cómo reaccionar antes Al recoger la caja vieron que no tenía muy buen aspecto. Estaban preocupados
esa situación. Miraron si podían cambiarse e de sitio, pero no había ninguno por como estaría el barco. Por fin, después de un largo viaje, llegaron a
libre. Así que les tocó volver donde estaban. La madre y el niño se estaban su destino. La ciudad con la exposición más grande piezas para construir.
poniendo las cazadoras para bajarse en la próxima parada ¡Habían tenido Cuando se bajaron del ferrocarril alucinaron con lo que había allí. Rascacielos
suerte! La caja tenía un pequeño golpe, pero esperaban que todo estuviese en miniatura, parques, fuentes, piscinas, etc.; todos construidos con piezas
bien por dentro. y al detalle. Al llegar al concurso, la cola de gente era inmensa. Un señor
les indicó cuál era su lugar. Después de tantos sustos, iban a exponer su
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